Una Granja Moderna Adopta la Tradición y la Tecnología

El Dr. Bents, un veterinario de cerdos de Hubbard Feeds, y su esposa, Jenna, son parte de la quinta generación que posee y administra Bents Family Farms cerca de Worthington, Minnesota.

“Nuestra granja nunca ha dejado de utilizar alojamientos grupales», explicó el Dr. Bents. “Mi familia todavía es propietaria de los pastos donde mi abuelo criaba cerdas.”

Cuando el padre y el tío del Dr. Bents compraron parte de la operación en la década de 1980, convirtieron un cobertizo de máquinas, que ya no era suficiente, en su sala de gestación, instalando corrales grupales para acomodar al hato. Utilizando madera y vigas recuperadas de una antigua casa de la propiedad, también construyeron una nueva sala de partos cercana. Se agregaron corrales adicionales en un antiguo establo lechero en la granja de su tío, lo que permitió una producción máxima de 120 cerdas en la operación de ciclo completo de los socios.

Treinta y tantos años después, la granja se ha modernizado una vez más y ahora alberga a 340 cerdas, al tiempo que retoma sus orígenes de alojamiento grupal de ciclo completo.

Historia de la Modernización

El Dr. Bents, su padre y su cuñado iniciaron la construcción de la nueva unidad en 2018 y trasladaron las primerizas a las nuevas instalaciones en 2019. Mientras El Dr. Bents decidía qué tipo de tecnología y mejoras realizar en la nueva unidad, recorrió otras granjas para ver qué estaban usando y cómo estaban diseñadas sus instalaciones. Quedó muy impresionado con los sistemas de alimentación individualizados y el control de gestión que proporcionaban, así como con su capacidad para mantener los objetivos de bienestar animal del Dr. Bents a la vanguardia.

GESTAL 3G es la solución

El Dr. Bents optó por instalar GESTAL 3G, un sistema de alimentación electrónica para cerdas (ESF) de libre acceso porque se integraba muy bien a su filosofía de producción, tenía menos piezas móviles y era relativamente sencillo. Una vez que conoció al equipo técnico estadounidense de Jyga, el Dr. Bents dijo que estaba totalmente convencido.

“Antes de instalar GESTAL 3G, en la antigua sala alimentábamos en el piso una vez al día y lo cubríamos con paja”, dijo el Dr. Bents. «Eso requiría una cantidad increíble de trabajo porque los corrales requerían limpieza cada 2 o 3 días y diariamente en el área de alimentación”, agregó.

“Ahora que tenemos el sistema 3G, el cuidado de las cerdas se ha simplificado y podemos mantener una condición corporal mucho más consistente en todo el grupo. Cuando estábamos alimentando en el piso, era común tener corrales con cerdas gordas y flacas, lo cual era muy difícil de manejar. Ahora, corregir la condición corporal requiere sólo presionar un botón en la computadora”.

El Dr. Bents, un firme defensor de la cría de animales de alto nivel, insistió en que los comederos GESTAL 3G también han abierto las puertas a otros beneficios intangibles en la unidad de los que no se habla a menudo.

Una vez que se mudaron a la nueva unidad, la demanda de mano de obra disminuyó inmediatamente debido a los pisos de rejilla sobre un pozo profundo que solo requiere bombeo una vez al año. El Dr. Bents, su familia y su empleado a tiempo parcial también aprecian no tener sus rodillas bajo tanto estrés al entrar a los corrales con cerdas agresivas para alimentarlas en el piso todos los días. Además, los pisos de rejilla han eliminado los costos laborales que suponen cultivar y colocar suficiente paja para que las cerdas se acuesten durante todo el año.

Pero ningún cambio está exento de desafíos. Las secuelas del COVID-19 pusieron al descubierto muchos puntos débiles de una industria que antes era viable. La incertidumbre en torno a los costos de los insumos, los precios de mercado, la gestión laboral y la salud no ha hecho más que aumentar especialmente en los últimos cuatro años.

Sin embargo, el Dr. Bents pudo abordar muchos de estos desafíos con la nueva unidad, que es sustancialmente más segura que antes.

“En nuestra antigua sala de cerdas, las aves y los gatos tenían libre acceso, lo que hacía imposible manejar la bioseguridad. Nuestra nueva unidad es mucho más biosegura: se ducha al entrar y se ducha al salir, tiene ventilación eléctrica y tenemos planes a corto plazo para instalar un sistema de filtración de aire”.

Historias de Éxito durante Generaciones

El Dr. Bents está orgulloso de la herencia familiar y de las raíces granjeras generacionales. Una granja de quinta generación no sucede por casualidad, sucede gracias a la dedicación, el sacrificio, la fe y el trabajo duro. El Dr. Bents dijo que su mayor logro en la granja es continuar con ella durante otra generación.

“Estábamos en un punto crítico en el que teníamos que decidir si íbamos a vender las cerdas o continuar con los partos. Para nosotros, haber iniciado el proceso de continuar con la producción de ciclo completo durante otra generación me genera un gran orgullo”.

También señala mejoras en los métodos y la tecnología de producción cuando considera los éxitos. A lo largo de las décadas, la granja abandonó la cría de sementales en favor de la inseminación artificial, lo que mejoró las tasas de concepción y redujo la ventana de parto de 3 semanas a solo 5 días. Además, el Dr. Bents aumentó el rebaño de un sistema de parto por lotes de dos grupos y de 10 semanas a un sistema de parto por lotes de cinco grupos y de 4 semanas. En resumen, los pequeños cambios a lo largo del tiempo se han multiplicado y han tenido un gran impacto.

“Podemos operar 340 cerdas con menos mano de obra de la que mi padre y mi tío necesitaban para cuidar 120 cerdas. Cuando mi abuelo criaba cerdos, destetar 16 cerdos por cerda al año era un logro respetable. Estamos en camino de producir 32 cerdos por cerda al año en mi tiempo de vida. En dos generaciones, casi hemos duplicado la producción de nuestras cerdas”, explicó el Dr. Bents.

La alimentación de precisión ha sido fundamental para el éxito que ha experimentado el Dr. Bents. Atestiguó que los costos de alimentación son mucho más fáciles de rastrear y controlar con los sistemas de alimentación 3G.

“Sé cuánto come cada cerda cada día, lo que hace que reservar ingredientes sea un proceso más ágil. También puedo controlar la condición corporal en un rango reducido, lo que hace que la planificación del uso del alimento sea más eficiente. Por ejemplo, si identifico que la condición corporal en el hato está por encima del objetivo, puedo reducir una décima de libra por día en nuestra curva de alimentación y ahorrar importantes costos de insumos. Nunca podría ser tan preciso con la alimentación en el piso”.

Por Amor a la Granja
El Dr. Bents es el primero en decir que no ha sido fácil: su granja es un caso atípico en lo que respecta a la filosofía de producción y el marketing. El alojamiento grupal conlleva el estigma de una posible reducción de la productividad y una mayor demanda laboral. Contrariamente a esta creencia, el hato del Dr. Bents representa alrededor del 20% del promedio nacional en mortalidad de cerdas.

“Escuchamos a la gente decir que el alojamiento grupal puede contribuir a aumentar la cojera y la mortalidad de las cerdas, pero ese no ha sido nuestro caso. Si comprendes a los animales, podrás manejarlos bien en cualquier tipo de sistema”, insistió el Dr. Bents.

“Nos encanta la forma en que criamos cerdos aquí en nuestra granja; creemos que estamos criando cerdos de la manera en que se deben criar. Pero al final del día, debemos obtener ganancias, porque si bien disfrutamos de lo que hacemos, no lo hacemos únicamente por diversión. La rentabilidad es importante, pero no vale la pena sacrificar el bienestar de las personas y los animales de la granja; No estoy dispuesto a aceptar una alta tasa de mortalidad en nombre de una mayor rentabilidad. No estoy dispuesto a aceptar un producto final de mala calidad para reducir los costos de producción”.

A corto plazo, el mayor objetivo del Dr. Bents es superar el primer año de plena propiedad con su esposa, Jenna, luego de la transición de su padre hacia él y la «supervivencia de la granja» es una prioridad en este momento. Pero yendo más allá de eso, el Dr. Bents sueña con aumentar el tamaño del hato de cerdas de una manera que le permita mantener su filosofía de producción y al mismo tiempo mantenerla emocionante e interesante para sus hijos, sobrinas y sobrinos.

«Estamos orgullosos de nuestro producto y de criar animales como creemos que deberían ser criados», dijo el Dr. Bents. Y acredita a GESTAL como una de las herramientas que utilizará para alcanzar esos objetivos futuros.

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